domingo, 17 de agosto de 2008

CHARLANDO

CHARLANDO


--- Hola Mar. ¿Cómo estás?
--- No demasiado bien. Tengo las tripas revueltas y una resaca de padre y muy señor mío. Estos días el viento la tiene tomada conmigo y no me deja descansar. Me mueve, me zarandea, hasta hacerme arrojar todo lo que llevo dentro. Parece que se ha calmado ya y esta noche podré dormir plácidamente.
--- A mí el viento hace que me sienta agitado, nervioso, irritable, destructivo; me vuelve loco.
--- No sé si será el viento, pero locos sí que estáis y destructivos también. Estoy harto de que os caguéis y os meéis en mí; de que me echéis encima toda la mierda que producís; de que invadáis mi territorio y de que arañéis mi piel con vuestros artefactos que destilan un pus negro que me envenena. Si seguís así, no voy a poder alimentar a las criaturas que viven conmigo como un día lo hicisteis vosotros. Pero en el pecado llevaréis la penitencia: quizá algún día anegue la tierra, como al principio, y os engulla en mi seno de donde salisteis hace millones de años.
--- Mar, no sé de qué me hablas. Sólo sé que yo no quiero que sufras.
--- Eres muy joven aún. Con el tiempo lo comprenderás.


--- Hola Mar.
--- Hola Al. Cuanto tiempo sin verte.
--- Han sido años de una vida muy intensa. Ya estoy jubilado y enfermo. Como ves, ando con dificultad apoyándome en un bastón, pero los que me conocen dicen que soy un gran hombre. Yo no sé si lo soy y pronto no sabré ni quien soy (tengo alzheimer, sabes). He llegado a ser uno de los hombres más poderosos de la tierra, aunque ahora sólo soy un anciano que apenas se sostiene en pié.
--- Ya veo, ya. Todo se deteriora. Y qué te trae por aquí a estas alturas de tu vida.
--- Quería reanudar aquella charla que tuve contigo cuando era un adolescente.
--- Las cosas no han mejorado desde entonces, han empeorado.
--- Lo sé, lo sé; pero quiero que sepas que yo he hecho todo lo que he podido para que no fuera así. He liderado el movimiento conservacionista, he luchado por evitar el cambio climático, he defendido el crecimiento sostenible y..
--- Corta el royo, Al. A mí no tienes que darme explicaciones; en todo caso te las das a ti mismo si es que tienes cargo de conciencia. No es que esté mal viajar por el mundo concediendo entrevistas, dando conferencias en los foros más selectos, en definitiva, concienciando a la gente sobre lo que llamáis “el medio ambiente”. Pero tú sabes que cuando realmente pudiste cambiar las cosas, cuando tenías el poder, no lo hiciste. Por cierto: te pagan bien las conferencias, ¿no?
--- Mar, no seas cruel.
--- Yo no puedo ser cruel. Vosotros, si. Sólo te pido un favor: Publica nuestras charlas.
--- Lo hare, lo haré.
NOTA: ENCARGO DEL ABOGADO DE AL GORE PARA PUBLICAR EL DIA DE SU MUERTE EN LA SECCION DE PUBLICIDAD DEL N.Y. TIMES.

3 comentarios:

mia dijo...

Casi se podrían hilvanar tus dos últimos post Lava, confundimos oír con escuchar, y nos decimos a nosotros mismos siempre que hicimos todo lo que pudimos hacer...

"Menos es más" la mayoría de las veces, pero eso no engrandece a los ojos de los demás y...

Y mejor no sigo, me temo que disertaría sin demasiado sentido, pero no quería leerte sin dejarte constancia, y mira, posiblemente esto sea buscar el "más que es menos"... será que es condición humana, y no lo podemos evitar... eso si, si me lo recriminas, procuraré asumirlo, en lugar de creerlo una crueldad.

lavabajillo dijo...

Mia: Como siempre muy bien vista la relacion que yo nunca imagine entre mi anterior texto y este. Pero la ultima parte de tu comentario reconozco que me supera y que no acabo de entenderla.

mia dijo...

Pues muy simple, de entrada, podría parecer que contesté para "dejar constancia"... luego busqué el MÁS, y aunque ciertamente no es así, yo jamás medito (ni mucho menos mido) mis contestaciones, podría parecerlo, y si tú me acusaras de ello,como hizo el Mar con Al, yo tendría que aceptarlo, en lugar de acusarte de crueldad... :)